Nelson Mandela salió de la cárcel sin renunciar a la violencia y supo combinar estas dos formas de lucha política
…en 1985 el gobierno de Sudáfrica da un paso decisivo: se ofrece a liberar a Nelson Mandela si renunciaba a la violencia.
Pero Mandela, fiel a sus principios rechazó la oferta de forma rotunda: «No puedo ni quiero hacer ninguna promesa, cuando ni yo, ni vosotros ni el pueblo, somos libres».