Ciudadanos turcos de la parte asiática de Estambul cruzando el puente para dirigirse a la Plaza Taksim:
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Así está la acampada de Gezi, en Estambul, este fin de semana:
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Protección familiar:
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Ataques policiales:
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Muestra del habitual sadismo policial gaseando a pacíficas personas:
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Sin palabras:
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Manifestantes con escavadora tomada de la destrucción del parque, contra las tanquetas de la policía:
Estudiantes de Medicina marchan en dirección a la Plaza Taksim para ayudar a los heridos por la policía:
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Palacio de Dolmabaçe:
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Interior del Palacio de Dolmabaçe como improvisada enfermería:
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Los activistas controlan los movimientos de la policía con un mapa colaborativo donde la gente que está en las calles anota lo que está viendo en tiempo real:
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Enorme multitud que resiste día a día en el parque Gezi de Estambul:
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Taxistas obstaculizan el avance de las tanquetas policiales:
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Improvisado abastecimiento:
Una de la numerosas cadenas de abastecimiento que se ven a diario en Taksim:
Y otras cadenas, para la limpieza:
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Fuente de las fotos, Occupy Gezi
Es admirable la capacidad de organización improvisada de los ciudadanos turcos para defender la causa en la que creen: Evitar la demolición de un parque con sus árboles centenarios. Lo que resulta deprimente es que sigue imperando el uso bestial de la fuerza frente a la razón. No hay nada más cobarde y rastrero que utilizar las armas contra el pueblo desarmado.