Hemos llegado ya al 2010, pero a buen seguro que si nuestros próceres no debaten este asunto será para protegernos, porque quizá no seamos un pueblo maduro para afrontar quién tiene que representarnos, y mejor que alguien lo decida por nosotros.
Eso está bien. Está bien que nos represente un señor que aunque no lo haya elegido nadie, bueno sí lo eligió el dictador Franco, pero que seguro que esto es lo mejor para el pueblo, para que no nos liemos en discusiones y no nos pongamos violentos.
Para evitar todo esto es mejor que estemos tutelados por un rey profesional -yo no sé donde se estudia para esa profesión- pero vamos, que se encarga de representarnos allá donde haga falta y tienen todo organizado -por nuestro bien, claro- para que cuando se haga viejo o la casque, se arreglan dentro de casa sucediéndole un hijo, hija o bastardo si fuera necesario y así como el resto de los mortales heredamos una casa o una vaca, u otra cosa, éstos heredan un país.
Bueno, os prometo que me cuesta ironizar con este asunto.