Ayer, en las Juntas Generales de Álava los tres representantes electos de la izquierda abertzale presentes en la institución (son cuatro y uno no acudió), se ausentaron cuando se acordó guardar un minuto de silencio en memoria de Fernando Buesa en el día que se cumplían diez años de su asesinato junto a su escolta Jorge Díaz.
No por previsible, deja de sorprenderme tanta miseria en el comportamiento de estos tipos.